Las cosas de Glorian (2)

Carta personal para: Serpiente. Absténgase de leerla otra persona.

Hola serpiente, hoy por fin he decidido decirte todo lo que siento, porque bueno, siento que ya estoy algo crecida, y no puedo seguir pensando en ti de esta manera, y es hora de madurar y aprender a decir las cosas que siento. He recibido algunos golpes en la vida por no decir lo que quiero, sabes, alguien dijo alguna vez en la vida “pida por esa boquita que usted nunca sabe cuando están por darle”, bueno, ahora me toca desahogarme y decírtelo. ¡Eres una falta de respeto serpiente! , ¿Cómo es posible?, ¿acaso no te dabas cuenta que era solo una nenita?, nada te daba el permiso para venir a encaramarte en mi cuna, montarte en mi colchoncito y enrollarte en mi nariz, EN MI NARIZ SERPIENTE, como sentirías si una lombriz se enreda en tu lengua ¿a?, ¿a?, no te gustaría el ahogo ¿verdad?, te tuve que agarrar con mi mano y empezar a llorar, y nunca se lo dije a nadie jamás y pues ya no lloro por eso, ahora soy fuerte.

Quiero que sepas, que luego de eso, tuve pesadillas todas las noches como hasta los 10, y que aún lo recuerdo muchas noches cuando pienso antes de dormir, ¿por qué esa serpiente me hizo eso?, ¿me quería matar?, bueno, solo era eso, y además sepa que si vuelves a hacer algo parecido con otro niño, NO TE LO PERDONARÉ JAMÁS.

Hoy te saco de mi mente como algo feo y comienzo a confiar en ti. Más vale que madures tu también y dejes ese tipo de juegos con los niños.